Programa de Danza Contemporánea Infantil

Obra de danza para Niños de Ester Lopezllera y la Cía. ETERNO CARACOL nos narra que en una gran, gran ciudad que se alimenta de miedos,caos,soledad, prisa y tiempo, una pequeña niña encuentra en su camino un ser que la llevará a conocer otra forma de ver al mundo. A través de juegos tradicionales mexicanos conocerá a personajes como la Sirena, el Apache, el Borracho,,el Catrín y el Valiente que de forma divertida le enseñaran el valor de la convivencia, la alegría y la amistad.El espectáculo cuenta con la iluminación de Manuel Márquez, música original de Eduardo González, escenografía de Francisco Paz y animaciones en video de Antonio Sarmiento

REPERTORIO

ECOS DE HÁBITAT

La humanidad tiene suficientes razones objetivas

para comprender y salvaguardar a la naturaleza.

Pero la naturaleza no será en definitiva salvada

sino con nuestro espíritu.
Jean Dorst.

¿Como lograr con mi danza, sembrar una semilla de conciencia y reparar el equilibrio que teníamos con nuestro entorno? ¿Como transmitir la necesidad de reencontrarnos con la naturaleza, aprender de sus enseñanzas, tratando de vivir más armoniosamente con ella y en ella?

Normalmente mi respuesta ha sido vía la poesía y la magia de la metáfora. Sin embargo, para este proyecto quisiera también recurrir a la ironía, el humor negro y el juego lúdico.

He nombrado al programa como "Ecos de Hábitat" porque vivimos en un momento donde la naturaleza y nuestro hábitat en si nos están mandando grandes eñales con sus cambios climáticos. El planeta tierra es nuestro mundo, el lugar donde habitamos y compartimos. Cada ecosistema se amolda de cierta manera a nuestro actuar y en muchos aspectos es un reflejo de lo que somos internamente; nosotros construimos o modificamos ese nuestro exterior desde nuestro interior. De ahí la enorme responsabilidad de nuestras acciones, intenciones y sueños. Y hay sueños que resultan catastróficos.

Conviven en el alma humana pulsiones de vida y muerte. El hábil artificio de crear civilización y cultura a partir de Natura. Un frágil equilibrio que estamos abandonando. ¿Como estar en armonía con la naturaleza, cómo escucharla en realidad cuando lo que hay son sus gritos pidiendo que no la destruyamos? Embebidos en nuestro deseo de confort y buen vivir, no vemos la agresión que le provocamos y nos provocamos. Corren tiempos que reclaman un despertar y un tomar conciencia.

Y en ese sentido, se propone con mi danza un granito de arena.

La intención de realizar danzas con guiones dramáticos han sido resultado de varias sesiones de charlas y entrevistas con un equipo de especialistas en la ecología. Ellos me han ayudado a entender más claramente lo que sucede con el medio ambiente y sus problemáticas: la contaminación, la deforestación, el derroche de agua y energía, el sobrecalentamiento de la tierra, etc.

Cada danza tocará una problemática particular donde logre obtener un ambiente de experimentación, aflorando sensaciones, emociones e imágenes llenas de metáforas y simbolismos. Jugaré a veces con la ironía y el humor y a veces con el drama al que realmente nos enfrentamos. Será alcanzar la libertad de expresión a partir del mundo interior del ser, haciendo énfasis en el proceso que nos conduce a esta revelación y situarla en el exterior y su influencia que nos conforma en el doble viaje de la retroalimentación.
Así mismo quiero que exista una relación muy estrecha con la música y el audio, sonidos y juego con la modulación de volumen y la velocidad de la música que servirán como pautas para el movimiento o en contrapunto de este.

Así pasaremos de un cuadro a otro, comenzando con una contaminación tan densa que no nos deja ni ver nuestro alrededor. Poco a poco observaremos a los personajes que luchan entre tanta densidad. Luchan consigo mismos. No se les ve nada, ni ellos ven nada, solo luchan con su vestimenta, avanzando con dificultad. Tratan de descubrir su cuerpo, de despojarse de tanto peso, de todo lo que les estorba. El esfuerzo es grande, el cansancio más, pero logran despojarse de todo lo que les coartaba. Sin embargo al quitarse la máscara y tratar de dar un aliento de vida, la asfixia acaba por derrumbarlos.

La escasez de agua desatará guerras y nosotros aún nos damos baños de Cleopatra donde el agua se escurre y corre en pleno derroche. Este cuadro se ubicará en un baño con su tina y todos los accesorios necesarios, patito de hule incluido, para preparar esa ducha deliciosa. El tiempo pasa y el sonido del agua es incesante, no deja de caer. El reloj se detiene cuando el personaje por fin se mete a la tina. Y se escucha un chapuzón. El baño desaparece, se ve un mar enorme, lleno de gozo y tranquilidad. El tiempo se suspende pero el agua sigue corriendo. Se comienza a escuchar el sonido del lavabo, del excusado, de la ducha, de una lavadora, del fregadero. Son los sonidos que gritan el agua se acaba. Los movimientos serán afectados por ellos. El personaje antes relajado se contamina, se ensucia. Es arrastrado por la coladera, yéndose en círculos al escuchar los últimos sonidos de las últimas gotas. Regresamos al baño y el personaje aún con el patito en la mano sale de la tina todo enjabonado.

Desde su concepción, la obra "El sentir de las tortugas" es una representación de una vida rodeada de paradoja; la tortuga es al mismo tiempo especie longeva y especie en anunciada extinción. Un símbolo de sabiduría muerto de una manera estúpidamente cruel. La vida y supervivencia natural es de por sí muy complicada. La reproducción, el nacimiento, el viaje de crecimiento, el enfrentamiento a numerosos peligros y luchas; la resistencia. En este cuadro, trato de imaginarme lo que sienten las tortugas; poniéndome en su lugar, expongo su dolor y el mío ante nuestras obscuridades y terribles traiciones a la naturaleza.

Para el cuadro que continúa el juego en contrapunto con el audio será la consigna a seguir. Tocaré el tema de la contaminación auditiva, donde ya nadie escucha por la cantidad de ruidos que provocamos durante el transcurso del día. La gente ni sus pisadas escucha, ni su propia música interna escucha. Solo se camina como sonámbulo, inmerso en la inercia de lo cotidiano, como suspendido en el tiempo, como aletargado, mientras afuera los sonidos rugen y gritan. Y aunque en realidad el silencio no exista, uno ya no escucha ni el corazón ¿Cuantas veces has escuchado el corazón? ¿Hace cuanto que no escuchas el corazón? Inercia o silencio. Suenan las pisadas cada vez más presurosas. Los pasos nos transportan. Montaña que escucha el eco del viento. Escucho mi suspiro por fin.

El programa estará dirigido a todo público en general porque creo que esta en todos hacer algo para salvaguardar a este nuestro mundo, en principio tomando conciencia para luego tomar acciones. Espero que mi danza siembre ese principio de conciencia.

“ENTRE OCRE Y AZUL COBALTO”, PAISAJES DANCÍSTICOS SOBRE LA PÉRDIDA DE SENSIBILIDAD HUMANA

Frente a la rutina, el ser humano ha perdido sensibilidad ante la belleza de las cosas simples, como la naturaleza o el transitar de la vida misma. Tal reflexión ha sido plasmada en cinco paisajes dancísticos que buscan sumergir en el espectador en instantes nostálgicos para hacer una pausa en su andar y reflexionar sobre su propio entorno.

Son cinco coreografías creadas por Esther Lopezllera quien, junto con su compañía Eterno Caracol, tomará por asalto el Teatro Legaria para presentar estas piezas bajo el programa titulado “Entre ocre y azul cobalto”, que tendrá lugar los fines de semana de septiembre del año en curso.

La destacada bailarina y coreógrafa -una de las más reconocidas dentro del gremio nacional-, explica que era el momento idóneo para regresar a algunas obras de su repertorio (sólo una de ellas es estreno), ya que estamos viviendo una época en la que la inmediatez está generando cierta insensibilidad en los seres humanos y justamente dichas coreografías abordan asuntos afines a ese problema.

“Siempre he sido una persona muy sensible independientemente de que sea creadora y parezca una esponja que absorbo todo lo que hay a mi alrededor. Hay cosas que me afectan mucho y la danza me ha permitido sacar esas sensaciones y emociones que manifiesto”.

A pesar de que su proyecto tiene un toque nostálgico, Lopezllera aclara que en ningún momento apela al drama o al desgarramiento. Tampoco busca que el espectador salga deprimido de la función. Sencillamente que la profundidad de su proyecto permitirá envolver al espectador en un ambiente poético.

Cada una de las cinco coreografías representa un periodo importante en la vida creativa de Lopezllera, quien ha compartido su vasta experiencia con importantes agrupaciones como Ballet Independiente, Contempodanza o Tándem.

No obstante la diferencia temática y estética entre ellas, existe un común denominador que las une: la tonalidad bajo la cual fueron producidas y que fue determinante en el título del programa. Al respecto su creadora explica:

“Los ambientes del programa curiosamente tienen que ver con las tonalidades. Por un lado el ocre, las tierras, el polvo y por el otro el azul, el agua. De alguna manera juego con estos dos valores y recreo metáforas hacia sensaciones y sentimientos humanos, como la pérdida o la tristeza”.

La primera pieza que se ejecutará del programa se titula “Al agua pato”, que alude al derroche del vital líquido y a las consecuencias sociales que esta situación pueda generar, como guerras por obtenerlo. A través de un singular sentido del humor, se invita al público a tomar conciencia en el cuidado del agua.

Después se interpretará la obra de estreno, “El sonido del polvo. La nostalgia del adiós”, donde se medita sobre la necesidad de cerrar ciclos para seguir adelante en la vida; también expone cómo en ocasiones se comete el error de aferrarse al dolor por una nostalgia llevada al límite.

Tal propuesta la inició Lopezllera al interior del aula con sus alumnos de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea; al ver el éxito de los primeros resultados, decidió elaborarla más y estrenarla ahora oficialmente con su compañía.

La tercera coreografía del programa será “El agua,lo abismal”, un trabajo unipersonal inspirado en las ideas de Li-Ching, un experto herborista que hablaba de la naturaleza de este líquido por abrirse camino, rompiendo cualquier barrera.

Más adelante continuará la danza “El sentir de las tortugas”, que invita a reflexionar sobre la vulnerabilidad de estos animales que, no obstante la longevidad que les ofrece la naturaleza, se enfrentan a brutales luchas para sobrevivir.

Finalmente se bailará “Para una oración”, que nace de la lectura que hizo Lopezllera del libro “Ensayo sobre la ceguera” de José Saramago, donde se habla de las vendas o antifaces que muchos seres humanos suelen colocarse para no observar la realidad tal cual.

-Podríamos decir que las cinco piezas comparten un llamado a no perder nuestra sensibilidad como seres humanos?-

“Sí, creo que es una buena observación. Siento que lo que nos ha pasado es que la vida nos está llevando por un ritmo muy acelerado, no paramos y ya no nos sentamos a conectarnos con nosotros mismos”.

Al preguntarle a Lopezllera si la danza es el arte perfecto para provocar en el espectador reflexiones de este tipo, la coreógrafa responde: “Siempre he dicho que la danza es maravillosa porque genera movimiento y el movimiento es vida. Quizá la danza no es tan intelectual pero llega directamente al corazón. El poder de la danza es impresionante, es como si fuera alquimia, genera una transformación mágica incomparable”.

Por esa razón, la bailarina está convencida que todo aquel que acuda al Teatro Legaria será parte de una experiencia nostálgica que, lejos de derrumbarlo, lo conmoverá para ser y hacer más a favor propio y de su entorno.

“Entre ocre y azul cobalto” se presentará los Sábados 4, 11 y 25 de septiembre a las 19:00 horas, y los domingos 5, 12 y 26 a las 18:00 horas en el Teatro Legaria, ubicado en la Calzada Legaria s/n, esquina Glorieta Allende, colonia Pensil Norte.

EnTre OcRe y AzuL CoBaLTo

El ocre es la mezcla de la arcilla con la limonita terrosa, es el producto de las alteraciones de los minerales de hierro, pigmento de coloración variable. El azul es el color básico que ocupa el 5° elemento en el espectro solar. El cobalto es un azul un poco más obscuro que el celeste; es un metal ferromagnético, duro y blanco azulado.

Entre Ocre y Azul Cobalto es un programa introspectivo en donde estas dos tonalidades crearán atmósferas contrastantes que nos ayudarán a reflexionar ante la pérdida, el cambio y la transformación. Es un reconocimiento a que todo termina y constantemente se vive en un duelo. Quien toma consciencia de esto vive más en paz; como en la profundidad del mar o en el inmenso desierto.

Ambos tonos están muy presentes en el quehacer artístico de la compañía desde sus primeras obras, representando atmósferas antagónicas pero que en la magia en donde los opuestos se atraen es imprescindible que exista esta dualidad para que se genere, se de el movimiento y el desarrollo.

La vida y la muerte, el día y la noche, la tierra y el agua, el desierto y el amor o lo seco y lo mojado. Los contrastes hacen que las cosas se distingan y se aprecien.

En la vida se crece en la paradoja y en el arte se juega con el frágil equilibrio de la certeza incierta, el tránsito del equilibrista en la cuerda floja